

Nada hay imposible!: hasta duermen juntos, incluso recientemente he observado como Draco a veces coge al gato como las gatas cogen a los gatitos pequeños para llevarlos de un sitio a otro: con la boca y por el cuello. Él-el gato-se pone lacio y se deja hacer hasta que se cansa del juego. Draco no le hace daño. La verdad es que dura poco, pero es algo increible y que no había visto nunca.Es una lástima no haber tenido nunca tiempo de coger la cámara para grabarlos.
Las fotos no son buenas, pero son ilustrativas.
Hay que dulce Draco.
ResponderEliminarUn beso para los dos.
Ando por aca leyendo, Saludos.