Se prohíbe que las mujeres fumen mientras esperan a sus amantes. Ni siquiera se permitirá que lo hagan tras los cristales de alegres ventanales. Y mucho menos si el amante se llama Ulises.
Me ha gustado mucho lo que escribes. Lo encuentro ameno, diferente y con finales que sorprenden y llaman a la refllexión.Así que me tendrás de vuelta por tu blog. Saludes y feliz fin de semana.
Me ha gustado mucho lo que escribes. Lo encuentro ameno, diferente y con finales que sorprenden y llaman a la refllexión.Así que me tendrás de vuelta por tu blog. Saludes y feliz fin de semana.
ResponderEliminarAnda, si ahora he caído en que eres mi compi de curso, jeje, qué cabeza tengo :-) Otro abrazo
ResponderEliminarLa letra y la tonadilla de ese tango, lo cantaba mi madre cuando estaba de buenas.
ResponderEliminarJoselu, mi abuela cantaba los dos primeros párrafos, lo otro ya era mucha tela. Pero los cantaba con ironía y criticaba la letra.
ResponderEliminarFumando espero
Al hombre a quien yo quiero
Tras los cristales
De alegres ventanales
Y mientras fumo
Mi vida no consumo
Porque flotando el humo
Me suele adormecer